Como base para esta cerveza se ha elaborado un estilo llamado Bohemian Pilsner, originario de la República Checa.  Se han utilizado maltas pils de mucha calidad y lupulos checos como el saaz para ofrecer un producto de 5% de alcohol, refrescante y suave, con ello conseguimos realzar las notas del aceite de oliva que detallaremos a continuación en la nota de cata.

Aspecto visual
Lo primero que sorprende es un color verde oliva, que recuerda al aceite de oliva virgen extra recien molido, espuma cremosa, blanca y persistente, cerveza brillante y transparente. 

Aroma 
En la primera capa olfativa detectamos trazas de oliva arbequina y notas sutiles a hoja de olivo, el lupulo aporta toques florales y especiados combinando  perfectamente entre ellos.  Aunque estemos hablando de aromas muy sutiles, pueden llegar a recordar a un paisage, en concreto, en el momento de recolección de las olivas a primera hora de la mañana. 

Sabor 
En boca es muy agradable, suave y refrescante, se aprecia la malta pils y las notas especiadas del lupulo saaz, pero lo que mas sorprende son las trazas que recuerdan al aceite de oliva virgen extra de gran calidad, dejando una delicada untuosidad con un retrogusto limpio, seco que invita a probar mas.  

Impresión general 
Fresca, compleja, bien redondeada y refrescante, gasificación media, única por la sensación en boca y su agradable suntuosidad para todos los publicos.